En medio de quejas de competidores y del gobierno de EU por las políticas gubernamentales para favorecer a la empresa estatal, a junio ésta logró recuperar 6.5 puntos en el mercado de gasolina y 10.3 puntos en el de diésel.
En medio de polémicas, Petróleos Mexicanos (Pemex) ha conseguido recuperar una fracción del terreno que los privados le habían quitado en la comercialización de combustibles.
A través de su producción e importaciones, la empresa estatal aportó 84% de la oferta para satisfacer el consumo nacional aparente de gasolina del primer semestre del año, 6.5 puntos porcentuales de avance frente al 77.6% conseguido en el mismo lapso del 2021, que fue un mínimo histórico para Pemex, que hasta el 2017 detentaba el 100% del mercado de gasolina y diésel.
En el caso del diésel, la cuota de mercado pasó de un piso de 68.5% a 78.7%, lo que significó una recuperación de 10.3 puntos porcentuales.
De enero a junio del 2022 el consumo nacional aparente de gasolina fue de 766,914 barriles diarios, cifra 7.5% mayor a la del mismo período del 2021, pero 1.8% inferior a la del primer semestre del 2019, previo a la pandemia. El consumo de diésel fue, a su vez, de 372,191 barriles diarios, volumen 14.9% superior al del 2021, pero 8.7% inferior al del 2019.
El consumo aparente equivale a la suma de la producción nacional y las importaciones, menos las exportaciones. El repunte de Pemex se ha dado tanto por el aumento de la producción en sus refinerías como por mayores importaciones. Este último rubro es el único con el que los privados pueden competirle a la empresa estatal, ya que de momento no hay refinación privada en México.
En gasolina, la producción de Pemex creció 22.3% a 274,582 barriles diarios y sus importaciones escalaron 13.4% a 377,505 barriles diarios. Paralelamente, las importaciones de empresas privadas cayeron 23.4% a 122,559 toneles diarios.
En cuanto al diésel, la refinación de la estatal creció 35.5% a 153,032 barriles diarios, mientras que su volumen de importaciones creció 28.5% a 140,008 toneles diarios. En tanto, los privados bajaron 22.4% el volumen de producto externo que introducen a México a 79,452 barriles por día.
La baja en la importación por parte de privados coincide con las quejas por parte de empresarios nacionales y extranjeros –principalmente estadounidenses– de la política del gobierno de Andrés Manuel López Obrador de favorecer a Petróleos Mexicanos (Pemex), lo cual se ha reflejado en el endurecimiento de reglas para la importación y la parálisis administrativa para el otorgamiento y renovación de permisos de importación.
Este último punto es listado por el gobierno estadounidense en su argumentación para solicitar consultas con el gobierno mexicano por la posible violación de sus compromisos del Tratado México-Estados Unidos-Canadá, lo que podría derivar en el establecimiento de un panel de controversias.
octavio.amador@eleconomista.mx