En mayo el valor de las importaciones de derivados que incluyen a la gasolina y el diésel subió 78% con volúmenes que apenas han variado; el monto por la venta de aceite sin refinar creció 55 por ciento.
En la carrera de precios entre el petróleo crudo y sus productos derivados los segundos llevan la ventaja, lo que está profundizando el déficit de la balanza petrolera de importadores netos de productos petroleros como México.
En mayo, las exportaciones de petróleo crudo del país crecieron 55% a 3,192 millones de dólares, ubicándose en su mejor nivel para un mes igual desde el 2014; sin embargo, las importaciones de productos derivados crecieron 77.9% a un monto récord de 4,371 millones de dólares, de acuerdo con cifras del Banco de México.
De forma más general, durante el mes las exportaciones petroleras totales (que incluyen otros productos derivados y gas natural) crecieron 63% a 3,809 millones de dólares, mientras que las importaciones petroleras totales (que además de derivados del crudo incluyen el gas natural y productos petroquímicos) subieron 76% a 6,995 millones.
Lo anterior dejó un déficit récord en la balanza petrolera de 3,186 millones de dólares, casi el doble respecto del monto de mayo del 2021.
En mayo el precio de la mezcla mexicana de exportación subió 62.5% a 104.6 dólares por barril, de acuerdo con datos de Petróleos Mexicanos.
Este avance que fue superado con creces por el salto de 67.9% en el precio spot de la gasolina reformulada para mezcla de oxigenados (RBOB, por sus siglas en inglés) en el mercado estadounidense a 3.32 dólares por galón; y por el incremento de 90.7% en el precio spot del diésel en el mercado de la Costa del Golfo, que se cotizó en 3.38 dólares por galón, de acuerdo con datos de la Administración de Información de Energía del gobierno de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés).
En términos de volumen las variaciones son apenas significativas en comparación con los valores. Las exportaciones de crudo cayeron 6.4% a 965,000 barriles diarios, mientras que las importaciones de productos derivados cayeron 0.1% a un millón 13,000 barriles diarios.
A su interior, las compras de gasolina descendieron 6.3% a 514,402 barriles diarios, mientras que las de diésel subieron 4.8% a 275,365 barriles, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Energía.
En términos de valor, las importaciones de gasolina y diésel representan 80% de las importaciones de productos derivados y casi 50% de las importaciones petroleras totales.
Crece participación de producto importado
En tanto, en mayo repuntó la participación del combustible importado en el consumo nacional. En el caso de la gasolina, la participación subió de 61.8% a 64% de los 797,398 barriles diarios en los que se cifró el consumo aparente (producto de agregar una producción de 287,012 barriles, una importación de 514,042 barriles y restar 4,015 barriles de exportaciones).
En el caso del diésel, la cuota importada pasó de 57.6% a 61.9% de los 444,116 barriles diarios de consumo nacional aparente, que a su vez fue producto de una producción nacional de 169,093 barriles diarios y una importación de 275,356 barriles diarios.
octavio.amador@eleconomista.mx