Pese a que la generación de energía a través de fuentes renovables ha demostrado ser viable, aún se sigue apostando en gran medida a los recursos fósiles y los pronósticos de los expertos apuntan a que los hidrocarburos seguirán siendo la principal fuente de energía en los próximos 50 años.
No obstante la necesidad de ampliar la oferta energética y la urgencia de revertir los efectos negativos del cambio climático, los gobiernos de la mayoría de los países, México entre ellos, ofrecen escasos estímulos a las energías alternas.
Un estudio realizado por la consultora Eclareon señala que en el segmento residencial la tecnología fotovoltaica ya es competitiva frente a los precios minoristas de electricidad de red en España, en algunas partes de Chile y, en algunos casos, en México e Italia.
Y advierte que para que el mercado fotovoltaico de autoconsumo pueda desarrollarse es necesario que las autoridades concentren sus esfuerzos en reducir las barreras administrativas y en crear o mejorar los mecanismos de regulación.
Ante este panorama, son bienvenidos los proyectos como el que desarrolla el consorcio Mexxus RG en Nayarit para operar un nuevo campo geotérmico, que proveerá de electricidad a unos cien mil hogares. Por cierto, es el primer permiso que México otorga a un particular para producir energía geotérmica.
Y hablando de oferta energética, relevante es el anuncio que hizo recientemente Petróleos Mexicanos (pemex) de que la paraestatal asumirá la segunda fase para la construcción del gasoducto Los Ramones, luego de haber declarado desierta la licitación para desarrollar el proyecto tan importante para el desarrollo del país.
A la convocatoria que hizo pemex sólo respondió la alianza conformada por la española Eneagás y la francesa GDF Suez; sin embargo, la oferta que presentó no cumplió con los requerimientos económicos ni técnicos establecidos.
Al presentar el esquema con el que desarrollará el gasoducto transfronterizo, pemex se comprometió a sacar el proyecto en tiempo y forma, por lo que prevé que Los Ramones II esté operando para el 2015, para lo cual invertirá cerca de dos mil millones de dólares.
En tanto, trascendió que las diferentes fracciones que integran el Senado ya se pusieron de acuerdo para sacar la reforma energética y que estará lista en este mes. ¿Será?