Durante el 2022 el país dio un paso atrás en materia de desarrollo de energías limpias; la participación bajó de 27.5% (en 2021) a 26.1%, estos resultados alejan a México de cumplir la meta de generar el 35% de la energía eléctrica de fuentes limpias.
Luego de que entre 2017 y 2022 la generación de energía limpia en el país aumentó 10.3%, entre 2021 y 2022 se redujo en 1.8%, derivado de una menor producción de las fuentes eólicas y fotovoltaicas, de acuerdo con un análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Este retroceso provocó que la participación de la electricidad generada a través de tecnologías con baja huella de carbono cayera el año pasado a 26.1% del total, desde el 27.5% del 2021.El nivel actual está prácticamente nueve puntos porcentuales por debajo de la meta establecida en la legislación nacional y en el Acuerdo de París, que estipula un 35% de generación eléctrica mediante tecnologías limpias para 2024.