La Secretaría de Hacienda estima en alrededor de 60 dólares por barril el precio de la mezcla petrolera de exportación, así como una producción promedio de crudo de 1.9 millón de barriles por día (bpd), para 2022, en momentos en que Petróleos Mexicanos (Pemex) batalla para incrementarla, dijo a Reuters una fuente gubernamental.
Las premisas aún preliminares forman parte de los indicadores que la Secretaría de Hacienda está usando para los cálculos de una parte de los ingresos del presupuesto fiscal del próximo año, el cual debería ser entregado al Congreso a más tardar el 8 de septiembre para ser aprobado. Los números podrían ser modificados por los legisladores.
«Se está previendo además un nivel de exportaciones petroleras de 1.1 millón de bpd» dijo a Reuters la fuente, quien pidió el anonimato por no estar autorizada para hablar del tema. «Podrían variar ligeramente las premisas macroeconómicas, pero eso es lo que se está considerando hasta ahora en Hacienda», añadió.
Las exportaciones de crudo -Maya e Istmo- promediaron 1.02 millón de bpd en los primeros siete meses del año, según cifras de Pemex. Tanto Hacienda como la petrolera dijeron que no tenían comentarios cuando fueron consultadas por Reuters.
El precio del crudo Maya para entrega en agosto en la Costa del Golfo, principal indicador del país, ronda los 64 dólares por barril, pero el promedio previsto por el gobierno para 2022 aún resulta significativamente superior a los 42.1 dólares usados para el presupuesto fiscal de este año.
Los precios del crudo habían repuntado más temprano este año, pero los nuevos brotes del coronavirus, atizados por la variante Delta, están generando preocupaciones sobre la solidez de la recuperación económica mundial, afectando la demanda de petróleo y otras materias primas. El precio estimado por México es además el que usa Hacienda para contratar su cobertura petrolera anual con la finalidad de proteger los ingresos presupuestarios de los vaivenes de precios, cuyo costo ha rondado entre mil millones y mil 200 millones de dólares en los últimos años.
En tanto, la producción de crudo estimada preliminarmente para el presupuesto del 2022 es superior a los 1.7 millones de bpd que está bombeando la estatal Pemex, que en los próximos días espera restablecer la producción suspendida por un siniestro ocurrido el fin de semana. Pemex apuesta a que la extracción en campos en tierra, provenientes de hallazgos recientes, permitirán apuntalar la producción del país rápidamente, aunque la empresa tiene años batallando por mantener la producción, la cual ha declinado progresivamente desde su tope de 3.38 millones de bpd en 2004.
Este año, Pemex espera cerrar en una producción promedio de 1.8 millón de bpd y el 2022 con 1.97 millón de bpd, según la más reciente estimación que baja las expectativas de alcanzar los 2.0 millones al cierre de este año. La gigante estatal, que enfrenta pérdidas recurrentes e ingentes pasivos financieros, es el principal contribuyente a las arcas del país y sus percepciones de fondos de origen petrolero -más los del gobierno por el mismo concepto- representan 14 por ciento de los ingresos presupuestario del sector público en los que va del año.