Durante su conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que hará denuncias contra empresas energéticas “por fraude”, aunque prometió respetar la orden de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que suspende su nueva política eléctrica, publicada por la Secretaría de Energía (Sener) el 15 de mayo.
Es importante recalcar que esta suspensión se concedió a la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), no a “las empresas”, debido a la controversia constitucional que el organismo interpuso el 22 de junio, por las afectaciones que dicha política tiene sobre la competencia.
El mandatario aseguró que ya alista las querellas “contra los que resulten responsables» de dañar a la Hacienda Pública por contratos «fraudulentos» entregados en administraciones pasadas, que obligaban a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), según él, a pagarle una tarifa a los privados.
Por otra parte, en medio de la pelea legal que anunció el presidente, cabe recordar la aparente negativa de la CFE para venderle gas natural a la compañía española Iberdrola, el pasado 24 de junio, para la planta de ciclo combinado de gas y vapor en Tuxpan, Veracruz.
Este proyecto tenía una inversión de mil 200 millones de dólares y, el mismo día que se anunció su cancelación, el gobernador del estado de Veracruz, Cuitláhuac García, anunció a través de redes sociales que el proyecto ahora pertenece a CFE, y se realizará una licitación para que empresas locales puedan continuar su construcción.