Europa está tomando medidas inéditas para reducir la dependencia de combustibles externos, como los rusos. Si hace poco presentó los terroríficos radares que pasarán por las calles buscando una nueva energía, ahora se propone acabar con el gas natural —sí, con indirecta a Putin— y construir una superturbina que pueda abastecer a todo el continente… pero atención a la propuesta.
El gas natural en Europa, a punto de desaparecer para siempre
Europa se encuentra en un momento decisivo en su transición energética, como marca el propio cronograma del Green Deal (o Pacto Verde). El continente está acelerando sus esfuerzos para abandonar los combustibles fósiles como el gas natural y adoptar fuentes de energía más limpias y sostenibles.
Una pieza clave de este rompecabezas es el hidrógeno verde, producido a partir de energías renovables. Recientemente, se puso en marcha un hito importante: la primera turbina de gas del mundo capaz de funcionar enteramente con hidrógeno verde.
Ubicada en Alemania, esta superturbina tiene el potencial de proporcionar electricidad limpia para 500 000 hogares, demostrando el tremendo potencial del hidrógeno para reemplazar al gas natural. Si bien queda mucho trabajo por hacer, esta turbina marca un paso en los esfuerzos de Europa por decir adiós al gas natural.
La superturbina de hidrógeno que alimentará a Europa: es la primera de muchas
Europa ha dado un gran paso hacia el abandono del gas natural con el lanzamiento de la primera turbina comercial capaz de funcionar enteramente con hidrógeno verde. Se trata de un hito tecnológico desarrollado por Ansaldo Energía, una empresa italiana especializada en el sector.
La turbina puede generar hasta 560 megavatios de electricidad, suficiente para abastecer a unos 500 000 hogares. Pero lo que la hace única es su capacidad para quemar hidrógeno puro en lugar de gas natural. Esto se logra mediante la adaptación de los quemadores de la turbina para ajustarse a las propiedades del hidrógeno.
A diferencia de otras turbinas que pueden usar una mezcla de gas e hidrógeno, esta turbina financiada por la UE y Suiza es la primera del mundo diseñada específicamente para funcionar al 100 % con hidrógeno. Es un hito que demuestra la viabilidad técnica y comercial de reemplazar los combustibles fósiles por hidrógeno verde.
Otros proyectos similares que abren camino al hidrógeno en Europa
Europa está apostando fuerte por las turbinas de hidrógeno como alternativa al gas natural. La turbina de Lingen es solo uno de los proyectos en desarrollo. Por ejemplo, en el Reino Unido se está construyendo la turbina de hidrógeno más grande del mundo en una planta de Keadby, con una capacidad de hasta 300 megavatios.
También se están desarrollando proyectos en Francia, Italia, España y otros países europeos. Muchas de las principales empresas energéticas del continente están invirtiendo en esta tecnología, incluyendo Siemens, GE, EDF y Enel, entre otros desarrolladores.
El objetivo es tener turbinas de hidrógeno operativas a gran escala en los próximos 5-10 años para ir reemplazando paulatinamente las plantas de gas natural. Esta fue la intención desde que el suministro de este combustible comenzó a ser más inestable en el año 2022.
Queda mucho trabajo por hacer, pero Europa tiene la determinación y los recursos para liderar esta transición energética global hacia el hidrógeno verde. El proyecto de Lingen es solo el comienzo de una nueva era en la generación de electricidad libre de emisiones de carbono.
Llegados a este punto, queda claro cómo el gas natural en Europa tiene los días contados —algo que, por otro lado, ya se planteaba desde 2022—. Lo cierto es que ahora veremos cómo la energía sustituta se genera en cantidades masivas gracias a esta superturbuna, pero no es la única propuesta que nos ilusiona. Este es el panel solar de Tesla que genera electricidad con La Luna.
Encuentre la nota en: https://www.ecoticias.com/hoyeco/gas-natural-europa/5109/