Brasil produjo 1.401 millones de metros cúbicos de gas natural al día durante el último año. Le siguió México con una producción de 1.199 millones de metros cúbicos.
Los precios del gas natural se han incrementado desde que inició la invasión rusa a Ucrania. Luego de meses entre peleas y amenazas, Rusia decidió recortar el servicio por unas supuestas fugas en el gasoducto de Nord Stream Dos que, hasta el momento, sigue cerrado.
Esta situación ha aumentado el valor del combustible fósil, pues se acerca el invierno y aún no hay soluciones eficaces que ayuden al continente europeo y solo se prevé un plan de reducción energética que es insuficiente para la demanda. Pero, ¿de qué manera impacta esta escasez a América Latina?
En la región, los mayores productores de este producto al día, durante el último año fueron: Brasil, con 1.401 millones de metros cúbicos; México, con 1.199 millones de metros cúbicos; Colombia, con 541 millones de metros cúbicos; Venezuela, con 471 millones de metros cúbicos; Ecuador, con 362 millones de metros cúbicos; Guyana, con 73 millones de metros cúbicos; y Trinidad y Tobago, con 53 millones de metros cúbicos.
El panorama puede tener efectos positivos y negativos en la región gracias a que se podría exportar el hidrocarburo desde países como Brasil y México; sin embargo, al ser la principal materia prima de los fertilizantes, desencadenaría un aumento en los precios de la comida.
América Latina se destaca por ser una región exportadora de commodities y poco expuesta a Europa, por lo que se ha beneficiado del alza en los precios de materias primas como el petróleo; sin embargo, persiste el riesgo de que se reduzca la demanda ante la posibilidad de que se presente una recesión global.
“Lo más seguro es que gran parte del gas que se produce a nivel global va a ser llevado a Europa, razón por la cual se empezará a convertir en un commodity fundamental para la reactivación y para mantener las economías latinoamericanas”, afirmó Víctor Mijares, profesor de Ciencia Política y Estudios Globales de la Universidad de los Andes.
Se proyecta que el valor de este tipo de insumo siga aumentado, tocando la disponibilidad de energía y gasolina en gran parte de Europa y creando a su vez un entorno poco favorable para los alimentos, especialmente en la región.
La guerra entre Rusia y Ucrania ha impactado a la mayoría de países, pero en especial a las naciones de Europa, quienes dependen de cerca de 40% del suministro de Rusia, lo que equivale a 72% de las exportaciones del hidrocarburo.
Este país es el segundo mayor productor de gas en el mundo con una producción de 701.000 millones de metros cúbicos al año. El primero es Estados Unidos con 934.200 millones de metros cúbicos anuales, mientras que el tercero es Irán, con 256.700 millones de metros cúbicos.
“El petróleo está actualmente bajo la influencia de las fuerzas financieras”, dijo Tamás Varga, analista del corredor petrolero PVM. “Mientras tanto, los repuntes de alivio, como el provocado por el huracán Ian en el golfo de Estados Unidos, se consideran fenómenos temporales”, agregó.