La Cuenca de Burgos tiene la suficiente infraestructura para procesar el gas ubicado en esta región petrolera, cuya mayoría de la superficie abarca el norte y parte del centro de Tamaulipas. En este caso, Petróleos Mexicanos necesita reactivar los complejos en rehabilitación, apuntó el Instituto Mexicano de Ingenieros Químicos (IMIQ).
Previo a la Convención Nacional que arrancará este miércoles por la tarde en un hotel de Tampico, el titular Juan de Dios Mastachi Pérez declaró que de los cuatro puntos modulares ubicados en la entidad y dedicados a crear la materia prima para la industria petroquímica nacional, hay uno en mantenimiento y es cuestión de ponerla en marcha para elevar la actividad, desplomada en recientes años.
“La producción en la Cuenca de Burgos conserva una decaída en la generación de crudo. Cuenta con plantas pequeñas, de tres modulares solo existen dos y una está en mantenimiento y son nuevas. No hay un problema grave de mantenimiento o en actualizarlas, necesitamos tener mayor producción de gas en Burgos para aprovechar ese gas”, externó.
Previa al evento nacional programado para los próximos 3 días en el puerto, que reunirá a funcionarios federales, estatales y especialistas en el ramo energético, así como empresarios, el presidente del instituto apuntó a ver otras regiones de la República Mexicana con la urgencia de plantas.
“Burgos tiene centros procesadores. El gas producido en la Cuenca debe tener líquidos, que se separan como materia prima. Se necesita mayor producción que crear complejos. En el Papaloapan hay campos ya en desarrollo y ahí sí se necesita infraestructura similar al norte”, agregó Mastachi Pérez.
En cuanto a la reforma energética aprobada en el 2014, el líder de los ingenieros químicos añadió que es poco su avance. Entre lo importantes, destacó ver a empresas privadas hacer la extracción de crudo y gas en algunas regiones del país, que termina en manos de Pemex. “Este será uno de los puntos que más abordaremos durante la convención», puntualizó.
