El sindicato de Pemex todavía usa la ‘caja chica’ que formó antes de 2019 mediante la cláusula 251 bis. Este año le pagó más de 60 millones de pesos a una constructora.
El dinero negociado por Carlos Antonio Romero Deschamps continúa como un afluente de recursos para el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).
Este año, el gremio le pagó 66 millones 852 mil 325 pesos a la empresa Estrategia Estructural que construye un mega deportivo en Cárdenas, Tabasco, que llevará el nombre del exdirigente.
Los recursos provinieron de los remanentes de la cláusula 251 bis, un estipulado a través del cual el sindicato recibió dinero durante años por varios motivos: las celebraciones del 1 de mayo – Día del Trabajo– y el 18 de marzo –Día de la Expropiación Petrolera– fueron los principales. Pero también estaban las capacitaciones o el fomento al deporte y la cultura.
El centro que construye Estrategia Estructural contará con canchas, albercas y gimnasios, según un video que subió a YouTube la sección 26 del STPRM en 2020, pero del que no ha vuelto a presentar información.
En el sindicato, Reporte Índigo confirmó que la obra avanza, pero la fecha de término de la obra no es pública. La compañía constructora es propiedad de Salvador Álvarez Hoth.
La cantidad que erogó el sindicato petrolero en la constructora alcanzaría para adquirir 65 mil 349 camas hospitalarias para el Instituto Mexicano del Seguro Social si se considera que en abril de 2023 el IMSS las adquirió en mil 23 pesos cada una.
La cifra también supera con más de 21 millones de pesos lo que el Gobierno federal ha gastado entre 2019 y 2022 en la búsqueda de personas desaparecidas cuyo registro, según la Comisión Nacional de Búsqueda de la Secretaría de Gobernación, llegó este junio a 111 mil 103.
De igual manera, el monto equivale a 73 veces la compra de agua que en 2022 hizo el Instituto Nacional de Migración para sus estancias migratorias, entre las cuales está la de Ciudad Juárez, donde un incendio mató a 50 migrantes el pasado 27 de marzo.
El STPRM ha erogado este año otros 3 millones 10 mil 58 de pesos en otras obras de infraestructura y compra de revistas y periódicos también provenientes de la cláusula 251 bis.
En total, en lo que va de 2023, ha gastado 69 millones 862 mil 384 pesos de esa reserva que dejó Romero Deschamps.
¿Cómo se consiguió este dinero?
La cláusula 251 bis fue acordada por Carlos Antonio Romero Deschamps con Petróleos Mexicanos (Pemex) en 2005.
En las negociaciones siguientes del Contrato Colectivo del Trabajo obtuvo aumentos de la estipulación de hasta el triple. El dinero conseguido, hoy en las arcas del sindicato, ha tenido un uso discrecional.
La única fuente desde la que se puede seguir la ruta de este dinero es la página de transparencia en la que el sindicato está obligado desde 2015 a reportar sus ingresos y egresos
En los últimos tres años de vigencia, –2016, 2017 y 2018– esta cláusula le dejó al sindicato 944 millones 42 mil 745 pesos. De ese monto, ha gastado 355 millones 23 mil 160 pesos.
2023 será el año en que se registe mayor gasto de la 251 bis, pues la cantidad ya superó a los 67 millones 22 mil 568 pesos de 2019 que eran el monto máximo. El año en el que el sindicato gastó menos fue 2021 con 12 millones 789 mil 262 pesos.
Si continúa el ritmo de erogaciones, el sindicato petrolero necesitará otros ocho años para terminar de gastar esta bolsa de dinero que consiguió Carlos Antonio Romero Deschamps para la dirigencia de su gremio.
La inmovilidad
Después de 26 años, tres meses y 23 días, el 16 de octubre de 2019, a través de un desplegado en diarios con alcance nacional, Carlos Antonio Romero Deschamps dejó la secretaría general del STPRM.
En un desplegado justificó que su renuncia fue: “por un escenario poco favorable para el cabal cumplimiento de mi responsabilidad (…) consciente de que mi compromiso fundamental es garantizar la estabilidad de nuestra organización sindical y la defensa de los derechos de los trabajadores (…)”. El 17 de marzo de 2021, renunció a su puesto en Pemex.
En su conferencia mañanera de ese día, el primer mandatario expresó: “A partir del día de hoy, el señor Romero Deschamps ya presenta su renuncia, es decir, deja de ser trabajador activo de Pemex. Eso lo hace por voluntad propia y también por un exhorto que le hicimos”.
El presidente López Obrador explicó que Romero Deschamps había optado por tomar las vacaciones que había acumulado durante sus años de liderazgo en Pemex.
Pero desde entonces, dejó de actuar en la escena pública mexicana. La imagen del poderoso y adinerado líder se esfumó sin que ni siquiera sus correligionarios del Partido Revolucionario Institucional, al que pertenece desde 1961, lo aludan.
Pero en el sindicato, la estructura de mando que formó sigue intacta. Ricardo Aldana Prieto, quien desde 1978 fue tesorero del STPRM y trabajó a su lado, resultó electo en marzo de 2022 como secretario general para un periodo que concluirá en 2024.
En su lugar –en la tesorería– se quedó Sergio López Salinas, dirigente local de la sección 40 y también alfil de Romero Deschamps.
Según la propia página del sindicato, se encuentra en el equipo Manuel Limón Hernández en la cartera de Interior Actas y Acuerdos, quien fue presidente del Consejo General de Vigilancia en 2002 y se amparó en contra de una orden de aprehensión por su presunta participación en el Pemexgate cuando se desviaron mil 500 millones de pesos a la campaña presidencial del Partido Revolucionario Institucional. De 2007 a 2018, fue tesorero.
Otros líderes repiten en el cargo que tuvieron cuando Romero Deschamps fue dirigente. Daniel Aguado Rojas en Exterior, Raúl Ramírez Rangel en Trabajo y Eleuterio de la Rosa Esteva en Organización y Estadística.
Los trabajadores de Pemex, entre riesgos
Los números en el portal de transparencia del STPRM continúa en la misma condición que la dejó Carlos Antonio Romero Deschamps: gastos millonarios a discreción sin rendición de cuentas.
Mientras, para los trabajadores, la tendencia en aumento de los accidentes en las plantas petroleras es una realidad cada vez más grave.
La tarde del miércoles 21 de junio, personal que laboraba al interior de la Refinería Olmeca, en el Puerto de Dos Bocas, Paraíso, Tabasco, reportó un incendio debido a la explosión de una pipa mientras cargaba combustible.
Por la mañana, un helicóptero que viajaba a una plataforma de Pemex, cerca a Ciudad del Carmen, Campeche, se desplomó.
La petrolera informó que los dos tripulantes de la aeronave fueron encontrados sin vida.
Fue una jornada que se sumó a otras en que los accidentes se acumularon.
Desde 2019, las plantas de Pemex han atraído los focos de la prensa nacional por las malas condiciones de seguridad en que laboran los trabajadores.
En febrero pasado, la planta combinada Maya de la refinería Minatitlán y la cavidad Tuzandepetl-331, en Veracruz, así como la refinería de Deer Park en Texas, fueron los escenarios de los desperfectos que le costaron la vida a tres trabajadores.
Ese mes, la petrolera actualizó su reporte anual en el que indicó una tendencia de aumento de la gravedad y frecuencia de los accidentes en sus plantas.
La primera tuvo un nivel de 0.49 accidentes que causaron incapacidad por millón de horas hombre. La segunda fue de 29 días perdidos por millón de horas hombre de exposición al riesgo.
La cifra de la gravedad fue la más alta desde 2015 cuando alcanzó los 31 días. Entre 2019 y 2023, este índice se ha incrementado en 70.5 por ciento.
Esto provocó que miembros del sindicato salieran a las calles y bloquearan la avenida Marina Nacional frente a la torre de Pemex por la negativa de la administración de respetar el Contrato Colectivo de Trabajo.
Liderados por el secretario general de la sección 35 del STPRM, Rigoberto Ramírez, los manifestantes acusaron que hay más de 5 mil violaciones en materia de seguridad e higiene que ponen en riesgo tanto a los trabajadores como a las instalaciones de la empresa.
Aseguraron que la mayoría debía utilizar dinero de su salario para adquirir equipo de protección personal, además de que, debido al congelamiento de plazas, se ven obligados a cubrir todo el turno.
Así negocian Contrato Colectivo 2023-2025
Con el mismo equipo formado por Carlos Antonio Romero Deschamps en la cúpula y el indicador de accidentes al alza en las plantas laborales, el sindicato y Pemex mantienen instalada la mesa de negociación del Contrato Colectivo de Trabajo 2023-2025.
Las cláusulas las analizan el dirigente nacional de los petroleros, Ricardo Aldana Prieto, comisionados sindicales y funcionarios de Pemex.
En un comunicado, el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) informó: “… Confiamos que trabajando juntos, empresa y sindicato, seguiremos fortaleciendo a Pemex para que continúe siendo como hasta hoy, la principal empresa de México y orgullo de los mexicanos”.
También expuso que, durante mayo, el STPRM celebró asambleas generales extraordinarias en las 36 secciones para conformar el pliego petitorio que renueve el siguiente Contrato Colectivo.
Se trata del tercer Contrato que se negocia con la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador y el primero a cargo de Ricardo Aldana Prieto, quien resultó electo como secretario general en las elecciones de febrero de 2022.
El del bienio 2019-2021 fue el último negociado por Romero Deschamps. Uno de los cambios para ese periodo fue la anulación de la cláusula 251 bis mediante la cual el sindicato obtuvo 944 millones 42 mil 745 pesos entre 2016 y 2018, según una extracción de datos de su portal de transparencia.
El de 2021-2022 lo negoció Manuel Limón Hernández quien desde 2019 ocupó el cargo de forma interina tras la salida de Romero Deschamps.
Como parte de su campaña, Aldana Prieto presentó cuatro estrategias fundamentales y 12 líneas de acción que se concentran en la defensa del Contrato Colectivo de Trabajo, el incremento de la productividad laboral y el establecimiento de un nuevo modelo de operación para la Secretaría General.
Otro de los compromisos que hizo fue aumentar las capacidades de Pemex, desarrollar un plan de negocios que proteja el medio ambiente, así como garantizar la transparencia y la rendición de cuentas.
Sobre la elección de Aldana, el presidente Andrés Manuel López Obrador expresó que no tienen favoritos.
“Nosotros no tenemos candidatos, antes de aquí se decidía, quién sí, quién no. Ahora no, son los trabajadores. Aquí estuvo el señor (Aldana), pero si me lo encuentro, me tendría que decir quién es porque no lo identifico, pues no he tenido relaciones con él. No lo estoy descalificando, sencillamente no tengo ninguna vinculación”.
Desde 2022, en manifestaciones callejeras, trabajadores de Pemex han expresado que en sus centros de trabajo existen rezagos, incumplimientos y violaciones al Contrato Colectivo, además del bloqueo de la asignación de plazas.