La configuración actual del sector eléctrico en México, creado a partir de reformas como la energética de 2013, es un sistema de «atraco, de beneficio a los privados, y de injusticia social», dijo este viernes el director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett.
«Es verdaderamente grotesco, cuando se analiza lo que han creado, no tiene ninguna relación con un mercado, con un sistema de competencia. Es un sistema de atraco, de beneficio a los privados y de injusticia social», afirmó el directivo durante la conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional.
Bartlett señaló que, con la reforma energética aprobada durante la administración del expresidente Enrique Peña Nieto, la CFE se vio obligada a comprar energía a empresas privadas, con lo que se ha generado una pérdida de 222 mil millones de pesos para la empresa paraestatal.
El funcionario criticó a los jueces que suspendieron la polémica reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, en tanto el Poder Judicial decide de fondo sobre su constitucionalidad.
Promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, dicha reforma es muy polémica porque cambia el despacho eléctrico para siempre suministrar primero la energía de las plantas viejas y de combustibles fósiles de la CFE, por encima de las centrales privadas de renovables y de ciclo combinado.
«Yo digo que esta es una barbaridad, es un sistema de saqueo, es algo pensado para que desaparezca la CFE y los intereses ajenos se queden con un mercado eléctrico para negocio o privado», afirmó.