La Sener prevé que el precio del gas natural puede duplicarse y llegar a 8 dólares por millón de BTU en 2026, afectando la competitividad de las centrales de ciclo combinado de la CFE.
México podría pagar hasta el doble por el gas natural que utiliza para generar electricidad e impulsar la industria. El combustible, que actualmente se compra en promedio a 3 dólares por millón de BTU, podría alcanzar entre 7 y 8 dólares hacia 2026, según proyecciones de la Secretaría de Energía (Sener).
El aumento proyectado no es un dato menor. El Plan de Desarrollo del Sector Eléctrico señala que, en este escenario, los costos más altos de combustibles tienden a disminuir la competitividad de las centrales termoeléctricas frente a otras tecnologías y a aumentar los costos de operación del sistema eléctrico nacional..
“Los mayores incrementos porcentuales se observan en gas natural, combustóleo y diésel, con impactos directos en la operación y expansión del sistema eléctrico nacional”, dice el documento.
La dependencia de importaciones mantiene a México vulnerable. Hasta un 80% del gas consumido proviene de Estados Unidos, tanto para generación eléctrica como para la industria. Esto hace que la fluctuación de precios internacionales sea un factor crítico para la competitividad del país

El impacto de un gas caro
Dentro de los análisis del sector, sí se prevé un aumento en los precios del gas natural. “El aumento viene por un incremento en la demanda internacional, producto de un mayor interés por el GNL en el mundo. Otro elemento que puede elevar los precios es que se prevé que haga más frío por el fenómeno de El Niño, pero no para pensar en esos números”, explicó David Rosales, socio en Elevation Ideas.
En el escenario de precios altos de combustibles, se disminuye la competitividad de las centrales térmicas respecto a tecnologías con fuentes de generación renovable, lo que aumenta los costos de operación del sistema eléctrico.
Lo anterior ocurre en un contexto donde la CFE alista la entrada en operación de centrales heredadas de la administración anterior y prepara el desarrollo de nuevas plantas, que en su mayoría son ciclos combinados que utilizan gas natural.
Dentro de los proyectos pendientes de la administración anterior se contemplan 10 centrales de ciclo combinado, de las cuales apenas dos han entrado en operación y el resto sigue en construcción.
Mientras que en los planes de expansión de la CFE para el periodo 2025-2030 se contemplan cinco nuevas centrales de ciclo combinado, que sumarán una capacidad instalada de 3,425 megawatts, y se espera que inicien operaciones entre 2028 y 2029.
Si el precio del gas aumenta, sí puede impactar los costos de generación, especialmente en un escenario donde la matriz eléctrica depende de manera significativa de centrales de ciclo combinado.
“A precios más altos de gas, precios eléctricos más altos; porque el precio que margina la mayor parte del país en el mercado eléctrico mayorista son las centrales de ciclos combinados, lo que podría hacer más atractivos los proyectos limpios”, apuntó Rosales.

El gas que se quema
El especialista considera que los precios tan altos que contempla la Sener podrían estar influenciados para que algunos proyectos de gas natural no asociado en México, actualmente no viables por los bajos costos, empiecen a tener sentido económico.
“Lo que me preocupa es que esta planeación de Sener no provenga de un análisis concienzudo de los fundamentales de Pemex, sino de buenos deseos para justificar precios de gas para Pemex o para incitar a privados a participar con la empresa”, aseguró.
Proyectos como el tan esperado campo gasífero Lakach, ubicado en aguas profundas del Golfo de México y que sigue detenido en su desarrollo, enfrentan diversos retos, pero uno de ellos es económico, pues el precio al que se puede extraer el gas no podría competir con los precios de 3 dólares por millón de BTU. Sin embargo, en un escenario donde el gas de importación supere los 5 dólares, al menos desde el punto de vista económico, sí podría ser rentable, comentó Rosales.
“Lo que falta es permitir la participación de dinero privado. Pemex tiene deseos ilimitados y recursos finitos; entonces, cada que Pemex tiene un proyecto, si no deja que participe un privado, se va a destinar a otros usos. Lo que se necesita son gasoductos de recolección, pero su rentabilidad es menor”, dijo.
Otra alternativa que podría ayudar a mitigar la dependencia de México del gas extranjero es el aprovechamiento del gas natural asociado que proviene de los campos petroleros de Pemex, que en su mayoría se quema o ventea, lo que impide su uso productivo.
De acuerdo con el reporte financiero de Pemex, al tercer trimestre del año, la petrolera reportó un envío de gas natural a la atmósfera de 449 millones de pies cúbicos diarios, lo que representa un aumento del 43.9% respecto al mismo trimestre del año previo.
Encuentre la nota en: https://expansion.mx/empresas/2025/11/05/precio-del-gas-natural-avanza-hacia-los-8-dolares-y-amenaza-la-competitividad-de-cfe















