Descarga PDF
Con la aprobación de las leyes secundarias de la Reforma Energética se prevé que exista una mayor construcción de gasoductos, por lo que el gas natural y el gas LP podrían tener un crecimiento simultáneo
Se requiere de infraestructura de alto carácter técnico y de ingeniería para lograr que la oferta del gas natural (GN) aumente en México, principalmente en el Distrito Federal. En entrevista con PetroQuiMex Gerardo Dueñas, fundador de la consultora Entropía, refirió que con la Reforma Energética se espera que exista una mayor construcción de gasoductos, por lo que se estima que el gas natural y el gas licuado de petróleo (LP) pudieran tener un crecimiento simultáneo, y por ende un consumo mayor al que actualmente registran en la capital, que es de 200,000 Gigajoules por día. “En la Ciudad de México el consumo energético, según cálculos preliminares de gas natural, es de 74.5 millones de pc/día y de gas licuado de petróleo: 27.7 barriles/día”. Uno de los propósitos de la Reforma Energética es dejar de generar energía eléctrica con combustibles caros y contaminantes como el combustóleo y usar en su lugar gas natural, que es cuatro veces más económico y 70% menos contaminante. Señaló que Estados Unidos ya logró una independencia energética en términos de gas natural, por lo que este producto se puede importar a muy buen costo mediante ductos que se conecten con las diferentes ciudades del país. Mientras que a nivel local es indispensable tener un buen manejo de las redes y la implementación de sistemas de distribución de gas. Para ambos casos, tanto para distribución de gas natural como para la de gas LP, la aplicación de las normas mexicanas más el manejo de proveedores, contratistas y permisionarios certificados, serán piezas clave para que el consumo de esos gases se incremente. “El reto es que la Ciudad de México tenga la capacidad técnica de supervisar esta transformación, además de contar con una buena administración de proyectos, como lo es el tendido de redes”. El especialista comentó que a mejor ingeniería, deberá haber mayor capacitación del personal involucrado para lograr una supervisión adecuada y óptima. “Los principios de seguridad, eficiencia, disponibilidad, aplicación del marco regulatorio y normativo (regularización), coordinación de obras de redes de distribución de GN, esquemas de competencia y competitividad, esquema precio / margen–liberación y control, establecimiento de precios de GN, figuras de comercialización para el GLP y la concordancia del desarrollo urbano con el uso energético, son retos que deben superarse”. En cuanto a las oportunidades, Gerardo Dueñas mencionó que habrá un balance energético estratégico, una proporción de combustibles gaseosos, un esquema de aplicación de precio, infraestructura y disponibilidad, además se garantizará el acceso universal a servicios de energía. El gas natural ocupa el 3er. lugar en el mundo entre las fuentes de energía primaria más utilizadas y representa el 20% del consumo energético a escala mundial. Asimismo, es el combustible fósil menos contaminante y más económico. “Sólo en las grandes ciudades del país existe preponderancia de un gas o del otro, lo cual es ilógico porque pueden convivir y crecer paralelamente”, afirmó Dueñas. Costeable El fundador de la consultora Entropía argumentó que es muy costeable el uso de gas natural siempre y cuando los gobiernos locales y federales aseguren el suministro energético de la población, ya que la cadena de valor de los combustibles gaseosos y fósiles es suficiente para atender la demanda. “Hay una transición de combustibles líquidos o combustibles primitivos en términos de desarrollo, como son la leña y el carbón, a combustibles gaseosos. Un modelo simple, que se pensaba desde 1997 y que se utiliza recientemente, es el uso del cilindro, por ello es muy probable que aquella persona que use tanque estacionario utilizará gas natural”. Detalló que hay que ver la aplicación, la disponibilidad y la estructura de precios, ya que en un principio tal vez el uso de este gas no sea tan rentable para ciertos usuarios. Aunque, dijo, a nivel industrial, el empleo de gas natural será una buena inversión pues le dará a la empresa competitividad y valor agregado. Seguridad El especialista afirmó que más infraestructura tiene que ir de la mano de mayor seguridad, ya que en los últimos años en algunos casos hubo una regresión, pues ciertos usuarios tuvieron que migrar del uso de GN al gas LP nuevamente, debido a diversos siniestros en la infraestructura (ductos) disponibles hoy en día. “Ahora se maneja una figura de distribución (plantas de suministro), esto es tomar el gas LP y mezclarlo con el aire y simular el gas natural, sin embargo, no es la mejor opción”. En relación con ello, explicó que se deben eliminar los problemas de combustibles robados porque sustraer ilícitamente el combustible provoca distorsiones económicas, pues reparar los daños en los gasoductos implica detener la distribución por varios días, además de que se pone en riesgo a la población. Regulación La regulación que rige las actividades relacionadas con el gas natural se desprenden de la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional en el ramo del petróleo, y por los ordenamientos emitidos por la Comisión Reguladora de Energía. De esta forma se normaliza el rendimiento sobre la inversión de los particulares, y los costos trasladables a los usuarios, etc., así como las actividades y los servicios que no forman parte de la industria petrolera en materia de gas natural, a efecto de asegurar su eficiente suministro. Se regula la distribución, entendiéndola como la actividad de recibir, conducir, entregar y en su caso comercializar gas, por medio de ductos dentro de una zona geográfica autorizada por la Comisión Reguladora de Energía. La realización de actividades de distribución, transporte y almacenamiento requiere permiso previo otorgado por la misma comisión.