En el mundo del petróleo, todo el mundo sabe que Venezuela tiene las mayores reservas probadas de crudo del mundo. Las reservas probadas son aquellas cantidades estimadas de petróleo que con una certeza razonable son recuperables en la actualidad, tanto comercial como técnicamente. Según los datos de la petrolera estatal PDVSA, las reservas probadas de crudo de Venezuela ascienden a los 300.878 millones de barriles, las más grandes del mundo. Sin embargo, lo curioso es que el 90% de todas esas reservas se encuentran en un pedazo de tierra (es un pedazo grande) conocido como la Faja Petrolífera del Orinoco, un pedazo de tierra ‘lleno’ de petróleo que Venezuela es incapaz de explotar con intensidad por falta de medios. Eso podría estar a punto de cambiar.
La empresa india Jindal Power ha firmado un contrato de asociación con la compañía petrolera estatal de Venezuela (PDVSA) para incrementar la inversión en los campos de crudo y ayudar a Venezuela a explotar la mayor acumulación de petróleo del mundo, que se encuentra en lo que se conoce como la Faja del Orinoco, según han revelado fuentes de Bloomberg familiarizadas con estas negociaciones. De este modo, la Venezuela busca solventar uno de sus problemas más importantes: inversión y tecnología extranjera para poder utilizar las mayores reservas de petróleo del mundo. Por su parte, la India podría obtener un petróleo seguro y barato, algo fundamental para un país que apenas produce crudo y que tiene que importar cada día millones de barriles.
Los ejecutivos de Jindal acordaron asociarse con Petróleos de Venezuela en la Faja del Orinoco, rica en petróleo, según han revelado las personas al tanto de las negociaciones, que han pedido no ser identificadas debido a que se trata de información que no es pública. La decisión de operar la empresa Petrocedeno marca la primera incursión de Jindal en el negocio petrolero y llenará el vacío dejado cuando TotalEnergies y Equinorabandonaron el proyecto en 2021. Ahora que el petróleo vuelve a alcanzar precios relativamente elevados ha vuelto el interés por esta zona.
La mayor parte del petróleo de Venezuela está ubicado en la Faja Petrolífera del Orinoco (FPO), donde llegan a los 279.117 millones de barriles. Para entender la magnitud de la cantidad de petróleo que hay en la FPO solo hay que acudir a los datos oficiales de reservas probadas de Arabia Saudí y comparar. El mayor exportador de petróleo del mundo (Arabia Saudí) tiene unas reservas probadas de 266.000 millones de barriles bajo tierra. Por ejemplo, EEUU apenas llega a los 44.000 millones de barriles, pese a ser el mayor productor del mundo. La FPO supera con creces esas cifras.
Desde el Servicio Geológico de EEUU explicaba en un informe de la zona que el pedazo que realmente tiene grandes cantidades de hidrocarburos abarca aproximadamente unos 50.000 km2 de la Provincia de la Cuenca Oriental de Venezuela y tiene cientos de miles de millones de barriles de crudo, aunque recuperables son los 279.000 millones señalados anteriormente, que son las reservas probadas.
Venezuela busca nuevos socios para el petróleo
La entrada de Jindal se produce mientras Venezuela remodela sus asociaciones petroleras en medio de la reimposición de sanciones estadounidenses después de que el presidente Nicolás Maduro no cumpliera sus promesas de garantizar elecciones justas. PDVSA y Jindal no respondieron a solicitudes de comentarios.
Después de años decrisis económica, hiperinflación, mala gestión y sanciones, muchas empresas extranjeras abandonaron el país, dejando a Venezuela sin la tecnología y el capital humano necesario para explotar sus vastas reservas de petróleo. PDVSA ha estado trabajando para atraer nuevos socios extranjeros para reactivar la producción de petróleo, aumentar los ingresos y reducir la deuda.
El acuerdo Jindal-PDVSA se alcanzó en Caracas a mediados de abril, horas antes de que Estados Unidos anunciara la inminente reimposición de sanciones. Jindal presentó una solicitud de permiso del Departamento del Tesoro de Estados Unidos para operar en Venezuela, dijo una de las personas, lo que podría ser necesario después del 31 de mayo para evitar violar las restricciones estadounidenses.
La empresa Petrocedeno estaba entre las principales productoras de Venezuela a mediados de la década de 2000, con un campo de 400 kilómetros cuadrados (155 millas cuadradas) y un mejorador de petróleo con capacidad de procesamiento de 190.000 barriles por día.
El plan de Venezuela con el petróleo
Con todo, Venezuela pretende recuperar el papel que un día jugó en el mercado de petróleo mundial. En la actualidad, este país caribeño no produce ni un millón de barriles diarios. Sin embargo, estas inversiones pueden ser clave para que el crudo vuelva a fluir en este país con intensidad. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, estimó este sábado que el país producirá «al menos» 1,2 millones de barriles de petróleo diarios (bpd) en 2024 y auguró llegar a los 2 millones de barriles diarios para 2025.
Según un informe publicado en abril por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), la producción de crudo de Venezuela cerró el primer trimestre en una media de 864.000 bpd, lo que representa un crecimiento del 18 % respecto al mismo período de 2023, cuando promedió en 731.000 bpd.
Pese a la meta de producción, Maduro habló de un nuevo modelo económico menos dependiente del petróleo, a través de «18 motores productivos» para que el país produzca «todo lo que necesita el hogar venezolano».