Pemex proyecta que la demanda de gasolinas y diésel crezca de manera importante al cierre de este mes; la petrolera ha producido más, pero las importaciones siguen la misma tendencia.
Petróleos Mexicanos (Pemex) espera cerrar junio con buen incremento en la demanda interna de combustibles (gasolinas, diésel y turbosinas), pues prevé que las ventas se disparen en comparación con igual mes de 2021.
De acuerdo con la empresa productiva del Estado, se estima que en junio registre una venta de 810,000 barriles diarios de gasolinas, esto es 40.6% mayor a lo del mismo mes de 2021 (576,000 barriles al día) y sería la cifra más alta en lo que va del año.
Lo mismo calcula para el diésel, las ventas de estas se duplicarían al situarse en 401,000 barriles al día, un incremento de 93.7%.
Mientras que las ventas de turbosina alcanzarían los 84,000 barriles diarios, un aumento de 37.7% en relación con junio de 2021, de acuerdo con Pemex estos son los resultados de su nueva estrategia de comercialización de petrolíferos.
Si bien son mayores ventas para la empresa productiva de Estado que encabeza Octavio Romero Oropeza, también implica que la tendencia de importación de combustibles siga creciendo, pues la producción nacional se queda muy corta para atender la demanda.
Pemex produce más, pero no alcanza
Los datos de Pemex muestran que, aunque ha elevado la producción de gasolinas y diésel que son los productos más demandados, a la par ha aumentado sus importaciones.
De enero a mayo de este año, reportó una producción promedio de 288,000 barriles diarios de gasolinas, 24.8% más en comparación con igual lapso de 2021.
Pero también la importación de gasolinas creció, pues en los primeros 5 meses del año, Pemex trajo del extranjero un promedio de 368,700 barriles diarios, un aumento de 14.8%.
Las ventas internas de gasolinas de Pemex promediaron los 655,600 barriles diarios, es decir, que aún importa alrededor de 55% de este producto para cubrir la demanda interna.
El mismo caso para el diésel, la producción en las refinerías de enero a mayo de 2022, promedió los 160,200 barriles diarios, 39% mayor al mismo periodo del año pasado.
En tanto que la importación de diésel, el lapso que se compara, se ubicó en 126,300 barriles diarios, un incremento de 20.8%.
Y las ventas de Pemex entre enero y mayo de este año, fueron 277,700 barriles al día de diésel.
Una promesa difícil de cumplir
Aún con más de la mitad de la importación de gasolinas, con un sistema de refinación que sigue por debajo de sus niveles de procesamiento de crudo y una refinería “Dos Bocas” que se perfila a alcanzar toda su capacidad hasta después de este sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que el próximo año, México dejará de comprar producto al extranjero.
Según AMLO, se han invertido 34,000 millones de pesos invertidos en la rehabilitación de las 6 refinerías, y se ha aumentado la producción de gasolinas al doble.
Pero lo cierto es que, de acuerdo con los datos oficiales de Pemex, en 2018 (último año de la administración de Enrique Peña Nieto), la producción de gasolinas promedió 207,100 barriles diarios de gasolinas, un aumento de 39%, no el doble.
Algo en lo que parece que el gobierno acertó fue en la compra de la refinería de Deer Park a Shell en Houston; AMLO ha dicho que costó 600 millones de dólares y de enero a la fecha se han tenido utilidades por 450 millones de dólares.
“Este año se paga, por el fenómeno este del aumento en el precio de la gasolina y la necesidad de refinación”, señaló hace unos días el mandatario.