El Consejo Mundial de Energía Eólica (GWEC) y el Consejo Mundial de Energía Solar (GSC), llamaron conjuntamente al gobierno de México para solicitar que se retomen las acciones para lograr la transición energética, y alejarse de los combustibles fósiles que resultan caros y contaminantes.
Ambos organismos publicaron esta tarde una declaración conjunta, como respuesta a la revocación que sufrieron puntos clave de la Ley de la Industria Eléctrica (LIE), que fue aprobada hoy en la Cámara de Diputados. El comunicado solicita a los legisladores que rechacen las modificaciones a la LIE, con el objetivo de evitar consecuencias adversas que puedan afectar más allá de la industria, hogares y, en general, el clima de inversión.
La información que destaca en el documento, habla sobre el daño causado al entorno de inversiones en energía renovable, durante los últimos dos años, en donde las reformas a la política, como este proyecto, representan una amenaza inequívoca para la inversión local y extranjera en el mercado de energía renovable en México, y socavando el principio de competencia justa.
Asimismo, el cambio legal tan crítico que relega el suministro de energía renovable hacia un segundo plano, deshaciendo el progreso alcanzado en la transición energética durante la última década, y revirtiendo la apertura del mercado energético en 2015.
GWEC y GSC estiman que los obstáculos para el desarrollo de energías limpias y la generación de las mismas, podrían poner en riesgo por lo menos 17 mil empleos en la industria solar y eólica, lo cual podría iniciar un efecto nocivo en la amplia cadena de valor de los sectores comercial e industrial, comprometidos con la energía sustentable a precios competitivos en México.
Como se ha expresado en otras ocasiones, estos organismos consideran que México necesita recuperar su estatus como líder en transición energética, para habilitar los compromisos climáticos mediante la certeza legal en el sector de renovables.
Por su parte, la Coalición de Acción de la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA), una red internacional de 115 compañías líderes en energías renovables, asociaciones industriales, sociedad civil, centros de investigación y organizaciones intergubernamentales, también formó parte como signataria de la declaración conjunta.