Londres. BP abandonó el objetivo de reducir la producción de petróleo y gas para 2030 mientras el director ejecutivo Murray Auchincloss reduce la estrategia de transición energética de la empresa para recuperar la confianza de los inversores, dijeron tres fuentes con conocimiento del asunto.
Cuando se dio a conocer en 2020, la estrategia de BP era la más ambiciosa del sector, con el compromiso de reducir la producción en un 40 por ciento mientras se impulsaba rápidamente el uso de energías renovables para 2030. BP redujo el objetivo en febrero del año pasado a una reducción del 25 por ciento, lo que la dejaría produciendo 2 millones de barriles por día al final de la década, ya que los inversores se centraron en los rendimientos a corto plazo en lugar de la transición energética.
La compañía que cotiza en la bolsa de Londres ahora apunta a varias nuevas inversiones en Medio Oriente y el Golfo de México para impulsar su producción de petróleo y gas, dijeron las fuentes.
Auchincloss tomó el mando en enero, pero ha tenido dificultades para detener la caída del precio de las acciones de BP, que han tenido un rendimiento inferior al de sus rivales en lo que va del año, mientras los inversores cuestionan la capacidad de la compañía para generar ganancias con su estrategia actual.
El canadiense de 54 años, ex director financiero de BP, ha buscado distanciarse del enfoque de su predecesor Bernard Looney, quien fue despedido por mentir sobre sus relaciones con colegas, prometiendo en cambio centrarse en los retornos e invertir en los negocios más rentables, primero y principalmente en petróleo y gas.
La empresa continúa con su objetivo de alcanzar emisiones netas cero para 2050.
«Como dijo Murray a principios de año… la dirección es la misma, pero vamos a actuar como una compañía más simple, más centrada y de mayor valor», dijo un portavoz de BP.
Auchincloss presentará su estrategia actualizada, incluida la eliminación del objetivo de producción para 2030, en un día para inversores en febrero, aunque en la práctica BP ya la ha abandonado, dijeron las fuentes. No está claro si BP proporcionará nuevas previsiones de producción.
Su rival Shell también ha desacelerado su estrategia de transición energética desde que su CEO, Wael Sawan, asumió el cargo en enero, vendiendo negocios de energía y energías renovables y reduciendo proyectos que incluyen energía eólica marina, biocombustibles e hidrógeno.
El cambio en ambas empresas se produjo a raíz de un renovado enfoque en la seguridad energética europea tras el shock de precios provocado por la invasión rusa de Ucrania a principios de 2022.
BP ha invertido miles de millones en nuevos negocios con bajas emisiones de carbono y ha reducido drásticamente su equipo de exploración de petróleo y gas desde 2020.
Pero los problemas en la cadena de suministro y los fuertes aumentos de los costos y las tasas de interés han ejercido aún más presión sobre la rentabilidad de muchas empresas de energías renovables.
Una fuente de la compañía dijo que mientras sus rivales habían invertido en petróleo y gas, BP había descuidado la exploración durante algunos años.
De regreso a medio oriente
BP está negociando actualmente inversiones en tres nuevos proyectos en Irak, entre ellos uno en el yacimiento de Majnoon, según las fuentes. BP posee una participación del 50% en una empresa conjunta que opera el gigantesco yacimiento petrolífero de Rumaila, en el sur del país, donde lleva operando un siglo.
En agosto, BP firmó un acuerdo con el gobierno iraquí para desarrollar y explorar el yacimiento petrolífero de Kirkuk, en el norte del país, que también incluirá la construcción de plantas de energía y capacidad solar. A diferencia de los contratos históricos que ofrecían a las empresas extranjeras márgenes muy estrechos, se espera que los nuevos acuerdos incluyan un modelo de participación en los beneficios más generoso, según han dicho fuentes a Reuters.
BP también está considerando invertir en el redesarrollo de yacimientos en Kuwait, añadieron las fuentes.
En el Golfo de México, BP ha anunciado que seguirá adelante con el desarrollo de Kaskida, un yacimiento grande y complejo, y la compañía también planea dar luz verde al desarrollo del campo Tiber.
También evaluará la posibilidad de adquirir activos en la prolífica cuenca de esquisto del Pérmico para expandir su negocio existente en tierra en Estados Unidos, que ha ampliado sus reservas en más de 2 mil millones de barriles desde que adquirió el negocio en 2019, dijeron las fuentes.
Auchincloss, que en mayo anunció una campaña de ahorro de costos de 2 mil millones de dólares para fines de 2026, ha pausado en los últimos meses la inversión en nuevos proyectos de energía eólica marina y biocombustibles y ha reducido el número de proyectos de hidrógeno con bajas emisiones de carbono de 30 a 10.
Sin embargo, BP ha adquirido el 50 por ciento restante de su empresa conjunta de energía solar Lightsource BP, así como una participación del 50 por ciento en su negocio brasileño de biocombustibles Bunge.
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