El presidente Andrés Manuel López Obrador, defendió este jueves su política energética luego de que la Suprema Corte ordenara la suspensión de una nueva política de la Secretaría de Energía (Sener), que limitaba la producción eléctrica renovable de los privados.
«No vamos a ceder en este asunto, porque tenemos que defender el interés público, del pueblo, de la nación», dijo el mandatario en la conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional, en un ferviente alegato en favor de las estatales Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
El pasado 29 de junio, la Suprema Corte de Justicia de la Nación suspendió de forma provisional la nueva política de la Secretaría de Energía, puesta en vigor desde el 15 de mayo, que limitaba la producción eléctrica renovable de los privados y prohibía la emisión en pruebas de las centrales limpias que estuvieran por arrancar.
Cuestionado sobre esta suspensión, ahora definitiva, por parte de la Suprema Corte, López Obrador dijo: «estamos en una revisión de todos estos ordenamientos legales porque se abusó mucho. El propósito, para decirlo con claridad, era dejar el mercado de los energéticos al sector privado, tanto nacional como extranjero».
Y esto implicaba, continuó el presidente, «menguar, socavar, destruir» a Pemex y a la CFE. «Era el propósito de la política económica en el periodo neoliberal y nosotros no estamos de acuerdo con esto», agregó.
Indicó, además, que la reforma energética del expresidente Enrique Peña Nieto (2012-2018) que liberalizó el sector se llevó a cabo para «terminar de destruir» a ambas compañías.