Se prevé que gran parte de los Estados Unidos se experimenten fríos extremos a partir de este fin de semana, lo que aumentaría la presión en precios de gas y electricidad por el alza de la demanda.
Los precios de la electricidad y el gas natural en Estados Unidos, tanto en el Medio Oeste como en la Costa Oeste, se dispararon a máximos de varios años mientras el frío extremo y la nieve cubren gran parte del país, congelando los pozos de petróleo y gas y provocando restricciones en los gasoductos y limitando el flujo de gas hacia California.
La producción de gas iba camino de caer unos 4,700 millones de pies cúbicos diarios (bcfd) en los últimos tres días, hasta un mínimo preliminar de siete meses de 94.3 bcfd el jueves, ya que las heladas cubren gran parte del país, provocando la congelación de pozos en Texas, Oklahoma, Dakota del Norte, Pensilvania y otros lugares.
Esa sería la mayor caída diaria de la producción desde la helada de febrero de 2021, cuando la tormenta invernal Uri cortó el suministro de gas de Texas y obligó al operador de la red eléctrica del estado a imponer cortes de energía continuos.
Casi 1,000 millones de pies cúbicos es suficiente gas para abastecer a unos 5,000,000 de hogares estadounidenses durante un día.
En el norte de California, los precios del gas para el jueves en PG&E Citygate alcanzaron la cifra récord de 56 dólares por millón de unidades térmicas británicas (mmBtu), superando el máximo histórico de 53 dólares registrado en diciembre de 2000, según datos de Refinitiv.
El gas en Southern California (SoCal) Border subió a 48 dólares por mmBtu, su nivel más alto desde que tocó la semana pasada un máximo de 22 meses de 50 dólares. Los precios en SoCal alcanzaron un récord de 136 dólares durante la helada de febrero de 2021.
Esto sitúa al gas de PG&E en camino de alcanzar una media de 9.21 dólares por mmBtu en 2022, lo que supondría su nivel más alto desde que alcanzó un récord anual de 8.62 dólares en 2008, según datos de Refinitiv que se remontan al año 2000. SoCal Border, por su parte, se encamina a una media de 8.95 dólares por mmBtu en 2022, lo que superaría su actual récord anual de 6.29 dólares en 2021.
¿Qué efecto tendría en México?
Los efectos en México podrían ser similares a lo experimentado en 2021, cuando la tormenta invernal Uri afecto a millones de personas por la falta de gas natural importada desde Texas para alimentar las centrales generadoras, lo que generó apagones intermitentes principalmente en el norte del país.
Por el lado de los precios, Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base, explicó que en Estados Unidos el aumento de los energéticos es más flexible en relación con la inflación (baja o sube en relación a los precios del petróleo y gas). Sin embargo, aclaró que en México históricamente los efectos del aumento de precio suelen ser más persistentes debido a un rezago en la oferta, lo que presiona por más tiempo a la inflación.
Carlos Hermosillo, analista financiero independiente, explicó que la gasolina y la electricidad son subsidiados en el país, por lo que el efecto cascada pudiera tardar más en llegar. «Para México creo que es uno de los peligros latentes. Además del efecto negativo que la política de gobierno ha tenido en sus finanzas, dada la cuantía de recursos necesarios para tratar de sostener el nivel de precios al consumidor final a punta de subsidios. Es decir, no ha pegado tanto en inflación, pero sí ha afectado a las arcas de gobierno. No puede ser un ciclo perpetuo», mencionó.
El especialista agregó que el efecto del aumento en la gasolina en México es similar a lo observado en EU, con ramificaciones al resto de la economía que deben darse temprano o tarde, pero irremediablemente llegan.
Con información de Reuters.